Qué son las creencias limitantes y cómo pueden determinar tu futuro.

Las creencias limitantes son una percepción de la realidad que nos impide crecer, desarrollarnos como personas o alcanzar todas esas cosas que nos hacen ilusión. Es algo que realmente no es cierto pero que como si lo es para nuestra mente y eso es lo que vale para nosotros, lo damos por bueno.

Puede ser algo con lo que hayamos convivido desde pequeños o que se haya incorporado en nuestra vida a través de alguna experiencia u opinión.

Si nosotros creemos que no podemos el cerebro ya nos predispone para eso. En el fondo también hay una gran parte de miedo por lo que puede pasar, aunque nosotros ya visualizamos el futuro, naturalmente desde la parte catastrófica y pensando en todo lo que nos va a ir mal en vez de todo lo que puede ir bien.

Las creencias limitantes las podemos encontrar por ejemplo en:

    • La búsqueda de empleo:

– No voy a encontrar ningún trabajo interesante.
– Seguramente habrá 100.000 candidaturas y no van a escoger la mía.
– Es imposible que encuentre trabajo pero tal y como está todo seguro que no me gustará o me pagarán mal.
– No lo sabré hacer mejor busco algo inferior a mi categoría; cómo me van a decir que no ni lo intento; si emprendo un negocio seguro que me saldrá mal con mi surte.

    • La promoción a un nuevo trabajo:

– Yo no valgo para ese ascenso.
– Aún no estoy preparado todavía para presentarme a esa candidatura seguramente no daré la talla.
– No creo que me merezca un aumento de sueldo, cualquiera de mis compañeros lo hacer mejor que yo.

    • La búsqueda de pareja:

– Nadie se fijará en mi; seguramente me dirá que no, mejor me evito el ridículo.
– Para que voy a ir a esa fiesta no lo pasaré bien.
– No tengo nada en mí que pueda gustar a otra persona.
– Todas las chicas que pueden valer la pena sólo se van a fijar en chicos guapos y musculosos.

    • La utilización de las TIC:

– Esto de las redes sociales es para los jóvenes a mí con 40 años se me pasó el arroz.
– En mi empresa todos saben de internet mucho y yo creo que no puedo nunca competir con ellos.
– Es demasiado difícil para mí nunca seré capaz de manejar un ordenador.
– Como me gustaría vender mis artesanías por internet pero eso es para gente con muchos recursos y muy joven.

A veces también se deben a «una» sola experiencia un poco negativa del pasado y que ya damos por aplicable en toda nuestra vida.

  • En el colegio recité una poesía y me quedé en blanco, yo es que no sirvo para hablar en público.
  • Siempre estropeo las cosas, mejor que ni lo intente.
  • Ya me decían que no servía para nada, cosa que hago, cosa que sale mal.

El elefante encadenado de Jorge Bucay.En otros casos son ideas que nos han repetido desde pequeñitos pero que no son ciertas.

Aunque no sean verdad si yo creo mis creencias limitantes, estas determinaran mi vida.
Las creencias pueden cambiarse, sólo son eso: CREENCIAS

  • Mostrar los sentimientos es de débiles.
  • Tengo que ser duro en el trabajo para hacerme respetar.
  • Los que han hecho tanto dinero o les ha llegado por familia, un golpe de suerte o robando.
  • No se puede confiar en la gente, todo el mundo va a la suya, uno debe ser competitivo para triumfar.
  • Si me equivoco, seré un fracasado.

 

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